2.5.1 Acceso a los componentes léxicos

Cuando el usuario haga click con el ratón sobre el texto con el fin de indicar que desea realizar una operación de modificación sobre el componente léxico asociado al texto que está señalando, se utilizan las coordenadas del texto para construir la clave con la cual acceder a la TTLT y recuperar el TTR asociado al componente léxico indicado. Sin embargo, aun quedan dos cuestiones importantes por determinar:

• El mecanismo mediante el cual se determina la posición inicial del texto correspondiente a un componente léxico.
• La información que se deberá almacenar en los TTR para poder soportar la operaciones de edición.

Respecto a la primera de las cuestiones planteadas, existen en principio dos métodos mediante los cuales proceder a su resolución:

• Crear durante el proceso de análisis las claves correspondientes a todas las posiciones de los caracteres que forman el texto de cada componente léxico y utilizarlas como entradas en la TTLT que apunten al TTR del componente léxico correspondiente. De este modo, cuando el usuario pulse el botón del ratón para indicar una operación, se puede utilizar la fila y la columna del carácter situado justo bajo el cursor para construir la clave a través de la cual acceder a la TTLT.
• Crear una entrada en la TTLT utilizando como clave de acceso las coordenadas del primer carácter del texto asociado al componente léxico. Para el acceso se debe construir un conjunto de funciones que busquen el carácter más cercano que tenga una entrada en la tabla.

El primer método presenta, en principio, los siguientes inconvenientes:

• Redundancia de información, ya que cada componente léxico tendrá asociadas tantas entradas de la TTLT como caracteres posea el texto que lo representa.
• Actualizaciones múltiples, como consecuencia del punto anterior, ya que durante el proceso de análisis incremental será necesario modificar todos los TTR de un componente léxico con el fin de mantener la consistencia de la información almacenada en ellos.
• Gran tamaño de la TTLT, ya que tendrá una entrada por cada carácter que aparezca en el texto.

Una solución inmediata consiste en hacer que las entradas de la TTLT almacenen un puntero a los TTR, como se suele hacer en lenguajes de programación imperativos clásicos como el C o el Pascal. En LISP, al almacenar elementos en una tabla hash lo que realmente se guardan son punteros al objeto, por lo que si no median operaciones explícitas de creación, dos operaciones que almacenen la misma variable en entradas distintas tan solo crean dos enlaces a la misma variable (zona de memoria). Esto tiene efectos perniciosos cuando queremos utilizar, por ejemplo dentro de un bucle, una misma variable para almacenar varios elementos sucesivamente en una tabla hash, ya que en realidad se están almacenando punteros a misma variable con lo cual todas las entradas tendrán asociado el último valor asignado a la variable. Hay que tener mucho cuidado con este tipo de situaciones, por otro lado bastante frecuentes en LISP, aunque en esta ocasión puedan resultar ventajosas.

El tener que crear una entrada en la TTLT por cada carácter presente en el texto hace que la TTLT alcance tamaños prohibitivos para textos medianamente grandes. Esto se convierte en el mayor incoveniente de esta forma de acceso a la TTLT.

El segundo método tiene como ventaja unos menores requerimientos de memoria, ya que para cada componente léxico sólo se almacena una entrada en la TTLT. Como contrapartida se encuentra la mayor craga de procesamiento asociada, ya que para facilitar la interacción con el usuario se permite que éste apunte sobre cualquier carácter del texto y no sólo sobre aquellos mediante los cuales se realiza la indexación de la tabla. En este método se necesita definir un conjunto de funciones cuya misión será buscar el componente léxico al que pertenece el carácter señalado.